Sin cuestas y llaneando y con solo 25Km recorridos, pudimos comprobar este pasado domingo, los efectos del agua en el campo.
La vida fluye por todo el recorrido. Der pueblo al pinar, el camino romano, se quedo en romano namas. En el Pinar, la fuente estaba limpia como una patera, y sus alrrededores totalmente saneados.
Es aqui donde tomamos el primer tentenpie, para luego entre pinos y arenas atravesarlo hasta el tajo de los pajarracos, aunque no pudimos ver ninguno de los dos monos que todavia existen en el pinar. Otra paraita y pa Castellar, donde dimos buena cuentas de sus bares, para una vez jartos, proseguir hasta la EStacion de SanRoque -Venta Los Timbales-, por el GR-7, que para sorpresa nuestra llevaba barro, pa ce un Belen.
Y bueno, terminanos con la rubia y con alguna que otra morena, antes de regresar a caaaaaaaasaaaa.....
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